Se encontrará consigo una mañana
con
una cara que no será la suya
se
mirará en otro espejo pero será este mismo
le
mostrará los pechos arrugados y no serán sus pechos los que
vea
y los
dedos torcidos pero será otra mano
y tocará seca la carne entre sus piernas
y no serán sus muslos los que toque
y no serán sus muslos los que toque
y mirará el mundo con ojos amarillos que no serán sus ojos
y
tendrá la lengua fría y no será su lengua!
vendrán
otras mañanas pero ya siempre será la misma mañana
la que venga
no llegarán abrazos a tus noches
y
vendrán otras noches,
otras nuevas
pero ya siempre
la misma noche